El San Prudencio logró una titánica visita al Zornotza después de un ejercicio de madurez que llegó a dos prórrogas. El equipo vitoriano exprimió su mejor versión en un encuentro cerrado y en el que se sobrepuso a sus bajas mediante la buena actuación colectiva.
El partido estuvo marcado por la igualdad desde el primer minuto. Ninguno de los contendientes fue capaz de ampliar la ventaja en el marcador y, de hecho, la máxima distancia no superó los cinco puntos.
Si bien el San Prudencio llegó al descanso con una mínima desventaja en el marcador de tres puntos, el equipo colegial irrumpió en el tercer cuarto de manera dominante para disponer de un colchón para la recta final. Sin embargo, el equipo local apretó en el último cuarto y propició una prórroga prácticamente interminable.
En el fango de las prórrogas, el San Prudencio tiró de oficio y fe para certificar una victoria balsámica en términos clasificatorios. Los gasteiztarras lograron un palmeo decisivo a falta de seis segundos para sellar el triunfo y regresar a Vitoria con la moral más que fortalecida.
"Estamos cinco equipos para conseguir tres plazas en el play off. Hay que seguir trabajando, nos vienen tres partidos contra rivales directos y si los sacamos daremos un paso grande en la clasificación", declaró Txomin, el segundo entrenador del San Prudencio.