El San Prudencio vuelve a sonreír en liga tras derrotar de manera contundente al Lakua Arriaga (0-4). El equipo colegial, salvo 20 minutos entre el final de la primera parte y el inicio del segundo tiempo, se mostró superior y muy sólido en un encuentro marcado para lograr el punto de inflexión.
El equipo de Torio arrancó el duelo con seriedad. El San Prudencio ganó las disputas y las segundas jugadas y se mostró cómodo con el balón. La presión surtió efecto, pues Resines abrió la lata en el minuto 10 tras forzar una pérdida en el equipo rival. A partir del gol, los colegiales tuvieron un par de ocasiones más para dejar encarrilado el partido, pero el Lakua Arrriaga apretó antes del descanso a través de las acciones a balón parado.
De hecho, la segunda mitad inició con un guion similar al final de la primera mitad. El equipo local tuvo una ocasión muy clara que Asier detuvo con los piés. Esa parada propició un arreón por parte del SanPru, que recuperó la batuta del partido gracias a los cambios y la tranquilidad en sus fases con balón.
Así, en un jugadón de Resines, Ibai aprovechó el rechace para marcar el segundo tanto en el minuto 63. Pero el San Prudencio no se conformó con esta renta y fue a por más. Ya en el epílogo, Kevin logró el tanto de la sentencia en el minuto 88 y Graña dio la puntilla en el tiempo de alargue.
"Contento sobre todo porque el equipo recupera el nivel competitivo que perdió en las últimas dos jornadas. Este es el camino", declaró Jonatan Torio al término del encuentro.