
El San Prudencio cayó en su visita a Amurrio (1-0), donde había en juego más de tres puntos en la lucha por el segundo puesto. El equipo gasteiztarra, que se mostró más reconocible que en anteriores enfrentamientos, dio la cara en un encuentro condicionado por detalles adversos como un gol en claro fuera de juego y una expulsión perdonada al contrario.
El conjunto de Torio ofreció una primera parte muy buena, con todos los jugadores enchufados y las ideas claras. El SanPru tuvo una ocasión a través de un robo alto de Aitor, pero en el minuto 12 el equipo gasteiztarra cometió una falta a pocos metros del área y en esa jugada, en la que no estuvo fino en las marcas, el rival se adelantó en un claro fuera de juego. Aun así, el SanPru no se descompuso, tuvo paciencia con balón, pero esa misma tranquilidad faltó en la zona de finalización, donde hubo precipitación en la toma de decisiones.
El SanPru tuvo otras ocasiones para poder empatar el partido antes del paso por vestuarios. También hubo disparidad de criterio arbitral, ya que Unax sufrió una patada sin balón que se resolvió con una simple falta, sin ningún tipo de castigo. En el 45, el mismo jugador del Amurrio cometió una falta sobre Ibai, que se marchaba solo hacia portería y, en esa ocasión, recibió solamente una cartulina amarilla.
En la segunda parte, el SanPru salió con ganas, siguiendo el mismo patrón de la primera mitad, siendo paciente con balón. Los de Torio subieron la intensidad de los duelos y encerraron en su propio campo al rival. Los cambios dieron aire al equipo, sobre todo por banda izquierda con Graña y Mousta. Sin embargo, la precipitación en zona de finalización privó al SanPru de poder empatar un encuentro en el que, sin duda, mereció más y donde fue objeto de un arbitraje con poca justicia.
"Jodidos por el resultado, pero estoy contento con el partido del equipo porque volvimos a ser reconocibles", declaró Jonatan Torio al término del encuentro.