El alumnado participante en el intercambio de inglés de 1º de bachiller con Kirchweyhe salimos el jueves 13 de febrero camino a Madrid, desde donde volamos a Hamburgo. Tras un trayecto en tren, llegamos Bremen. Allí, más concretamente en Kirchweyhe, nos esperaban nuestros compañeros/as de intercambio alemanes. ¡Qué emoción al vernos por primera vez! Tras el abrazo inicial lleno de alegría por poder finalmente encontrarnos, nuestros nervios se disiparon... ¡llegó el momento de comenzar plenamente a disfrutar de la experiencia! Cada uno de nosotros nos fuimos con nuestras familias de acogida para asentarnos y descansar para el viernes, pues nos esperaba un día lleno de novedades.
El viernes pasamos la mañana en el colegio, donde estaban terminando su semana de proyectos; los alumnos de todos los cursos dejan atrás las clases tradicionales durante una semana y se vuelcan en un proyecto de los múltiples que organiza el centro: talleres sobre Harry Potter, el medio ambiente y su cuidado, manga y cómics, opciones para pasar un año sabático tras el bachillerato, gastronomía y cocina turca, un periódico sobre el colegio, etc. Después de poder observar todas los diferentes proyectos en los que han trabajado, comimos juntos en el comedor del colegio y después estuvimos jugando en el polideportivo del colegio, de manera que pudimos conocernos mucho más y estrechar nuevos lazos: lo perfecto de cara al fin de semana que nos esperaba.
Durante el sábado y el domingo, no hay programa diseñado, sino que cada alumno pasa tiempo con su familia y amigos, de manera que pueden integrarse de una maravillosa manera en la cultura y sociedad.
Nos veremos de nuevo el lunes, preparados para compartir las peripecias del fin de semana y para comenzar nuestra visita cultural a Bremen, ciudad hanseática y llena de historia.
